Yendo de la casa al living

Mal momento usaron los encargados de boicotear el transporte urbano local. Distintas organizaciones llamaron a los usuarios a no tomar colectivos durante dos días en protesta por el pésimo servicio. Pero resulta que, como bien se puede apreciar en la foto, los empresarios tomaron los recaudos para desmentir tamaña infamia poniendo a nuestra disposición un auténtico mini-living (con celular incluído), cosa que, de ser cierto aquello de que las unidades tardan un hora en arribar a las paradas, no desesperemos ni entremos en un estrés innecesario.
Pensar que en otras ciudades del mundo, el descontento de la gente por el mal servicio se expresa en garantizar (en serio) que estos vehículos rueden por sus calles totalmente vacíos, porque sus empresarios se llenan los bolsillos sin arriesgar un peso. Nada que ver con el arrojo de nuestros inversores cordobeses...