jueves, 4 de septiembre de 2008

Agustina

A poco de cumplir tres años de un tratamiento que afectaba su salud, ayer me comunicaron junto a Beatriz que mi hija Agustina tendrá el alta en menos de un mes. Raquel, nuestra terapeuta personal del programa Cambio, hizo como que miraba para otro lado y de pronto, en un movimiento facial lleno de picardía y orgullo, dió media vuelta hacia nosotros para sorprendernos con el tan ansiado anuncio.
Nuestros corazones se estremecieron de felicidad. Sólo atiné a tomar la mano de mi mujer y decir gracias.
No existe amor más grande que el de un padre hacia sus hijos.

No hay comentarios: