jueves, 20 de noviembre de 2008



Ángel


Fue en un tiempo
no puedo precisar
el cuando ni el como
Recuerdo sí
su pletórica belleza
Vestía
un blanco radiante
como transparente
No es común
advertir tanta luz
- me dije -

Sus ojos
o lo que fueren
me propusieron seguirlos
Eran destellos
de una paz
inalcanzable
No temas - susurró -
estoy de paso
y me ofreció su corazón
desinteresado
eterno

Vivió mi vida
río conmigo
lloró conmigo
me amó hasta el final
Cosa extraña
era como un ángel

También sucedió en un tiempo
que marchose
Me olvidaba
díjome su nombre
Carmencita
Como explicar tanta vida conseguida

Hoy se cumplen diez años que nos dejó una amada y entrañable compañera que conocí en la Facultad. Este poema lo escribí a poco de su muerte.
Gracias María del Cármen por haberte tenido.



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